Este encaste fue creado mediante el cruce con diferentes procedencias entre las que destacan Juan Pedro Domecq y Núñez de Villavicencio. Álvaro Domecq y Díez fue el autor de esta mezcla, que comenzó a partir del año 1954 combinando reses del Duque de Braganza ("Veragua" + "Conde de la Corte"), con reses de Núñez y reses de sus hermanos (Juan Pedro Donecq y Núñez de Villavicencio).
El toro de "Torrestrella" es hondo, de buena alzada y desarrollo óseo, con morrillo descastado, generalmente bien armado con encornaduras que suelen ser ofensivas.
Morfológicamente se pueden localizar algunos rasgos de la casta "Vazqueña".
Las pintas son muy variadas, destacando negros, colorados en todas sus variantes, castaños, tostados; con menos frecuencia aparecen cárdenos, ensabanados y jaboneros (Estos últimos debido a la casta Vazqueña), se pueden dar en menor medida salineros o sardos. Estos pelajes pueden ir acompañados por un gran número de accidentales, entre los que destaca la presencia del burraco y del salpicado, ambos muy típicos del encaste "Torrestrella".
En cuanto al comportamiento se le define como un animal encastado, combativo, y de embestidas fuertes con el defecto que a veces le cuesta humillar por su tipo de morfología corporal.