Madrid - Lunes 15 de Mayo - 5° de San Isidro
Llega el día grande para todos los madrileños, el día de vestirse de 'chulapos' y de acudir en masa a la plaza de toros. Con elegancia y con ansia de ver faenas de esas de Madrid. Todo preparado para ser una tarde memorable; ganadería de esas llamadas de "garantías" y toreros reconocidos del gusto popular de Madrid.
Pero como siempre, algo suele fallar en esta ocasión, fallaron los dos componentes básicos para la fiesta de los toros; el toro, y el torero. Apenas se podía reconocer a Curro Díaz o a Alberto López Simón, que ambos dejaron escapar los dos toros con opciones de triunfo de la corrida, ambos abroncados por el respetable aficionado de Madrid, que no hace tanto les brindaba por unanimidad la puerta grande venteña. A Curro Díaz se le vió deshorientado, sin tener la suficiente claridad en la mente para poder completar faena, se le puede perdonar, por que a fin de cuentas ha sido en una sola ocasión. En cambio; el de Barajas Alberto López Simón, parece que viene siguiendo un patrón de intoreabilidad hacia sus contrincantes con cuernos, desde finales de la temporada pasada. El madrileño, ya no es aquel matador que nos dejaba a todos embobados con sus derechazos cuajados descolgando con una impecable clase su mano izquierda, preparada en filas para el cambio de mano.
De la actuación de Paco Ureña no se puede criticar demasiado, -salvo esa desconsiderada manera de arrojar el capote en la cara del toro-, que debido al percance puede hasta llegar a ser comprensible. Al maestro murciano se le vió entregado en cuerpo y alma con su segundo, que lejos de presentar embestidas, sólo regalaba brameos mas propios del ganado manso.
Abrió plaza "Liricoso", un negro listón que tardó poco en acusar su debilidad de fortaleza, rozando casi la inválided tras cumplir con los picotazos de paso asestados por los varilargueros. Curro Díaz brinda el toro a su majestad el rey don Juan Carlos I, quedan claras las aspiraciones repúblicanas del de Linares, porque ese toro, no era en absoluto para otorgar brindis al rey emérito o a nadie. Algunos muletazos con la derecha pegado a tablas y en la querencia del toro y bajonazo con la espada de muerte. Silencio.
Le siguió en el orden de lidia "Rondador", un toro falto de transmisión en todos los tercios de suerte. Paco Ureña se muestra correcto, preciso y por encima del toro; tocando con insistencia y tirando la bamba por ambos pitones, acobardando incluso al burel montalvino. Bajonazo con los aceros y silencio. Correcto el de Lorca, no pudo hacer mas.
Un espectacular castaño de nombre "Carcelero" sale en tercer lugar, saluda López Simón lanzando el capote a su estilo propio de verónica desviada a delantal pegado. El toro deja ver pronto su lujosa capacidad para humillar, aunque de modo imaginable no se luce del todo en sus arrancadas al caballo. La cuadrilla del barajeño se desmontera tras realizar una gran suerte de banderillas, una vez agarra don Alberto la muleta es incapaz de pegarle una serie sin que el bravo toro de Montalvo le agarre la muleta, el astado tenía un extraordinario pitón izquierdo que López Simón no fue capaz de cuajar. Muy por debajo de este primero. Pequeños pitos tras aviso.
Actuando en cuarto lugar salió el mejor toro de la tarde, "Escandaloso", negro salpicado en tipo de "Algarra", aunque recordó a la extinta "Casta Jijona" perteneciente en su día a este hierro ganadero. El de Montalvo acudió de largo y apretó riñones en los lomos del jaco. Curro Díaz toreando muy en recto, sin entrega, sin garra y sin la verdad suficiente que necesitaba para triunfar con ese pedazo de toro en Madrid. No fue su día. El respetable le aplicó una división de opiniones con una mayoría de pitos.
"Salinero" sale en quinto lugar, un colorado con ojo de perdiz, sale de chiqueros galopando al tercio haciendo un extraño cuando recibe Ureña, el murciano impresionado por la reacción del toro arroja el capote, y es empotrado contra las tablas. Afortunadamente el susto no pasó a mayores, buena colocación de palos de Armando López "Azuquita"; con el trapo muletero, Ureña se entrega, pero el toro mansea y no transmite en los escasos muletazos. Silencio.
Apenas pudo hacer nada López Simón con "Rivero", otro colorado que no dejó posibilidades mas allá del pase forzado. Silencio
Ficha:
Plaza de Toros de Las Ventas de Madrid. Lunes 15 de Mayo. Quinta de abono. Fiesta de San Isidro Labrador. Toros de Montalvo para los diestros:
Curro Díaz, silencio y división de opiniones.
Paco Ureña, silencio en ambos.
López Simón, pequeños pitos tras aviso y silencio.
Fotos: Plaza1
Parte médico del banderillero Manuel Lebrija:
RE: Pintor de Sueños